.

.

.

Jauja, donde pagan a los hombres por dormir, fustigan a los hombres que insisten en trabajar, los árboles son de tocino y sus hojas de pan de fino. Las calles están adoquinadas con yemas de huevo y lonjas de tocino, asadas y fritas...

27 de marzo de 2018

Semana Santa, semana patria en el Valle de Yanamarca - Jauja


Todos los años, mientras en el valle del Mantaro se festeja con júbilo y devoción las actividades religiosas por la pasión, muerte y resurrección de nuestro señor Jesucristo; los jueves de Semana Santa se escenifica en el Valle de Yanamarca, la alegoría de “La Maqtada” o la “Tropa de Cáceres” ante una multitud de turistas locales, nacionales e internacionales que llegan hasta el valle de Yanamarca para apreciar esta interesante danza. Este baile es una remembranza de la llamada “Campaña de la Breña”, que se desarrolló durante la guerra con Chile en la sierra peruana bajo el liderazgo del mariscal Andrés Avelino Cáceres.

En la escenificación se puede apreciar a diferentes personajes como El Mariscal Cáceres, músicos compuestos de tambor y cornetas de guerra, escolta, oficiales, majtas, pashñas y las rabonas. También, los rancheros o carambiash y los chilenos que son vencidos y capturados.

Es una danza histórica que no ha perdido la caracterización de esa época por lo que el Instituto Nacional de Cultura - Junín, mediante Resolución Directoral No. 009-2008-DRC-J declaró a “La Maqtada o Tropa de Taita Cáceres de Acolla y Pueblos del Valle de Yanamarca, Patrimonio Cultural de la Nación”.

El Mariscal Cáceres, encabeza a su “Tropa” con marcialidad y “estilo militar”, le acompañan los músicos, la escolta, los oficiales, los majtas (jóvenes cholos) y las rabonas que bailan con movimientos rítmicos y perfectamente al compás del tambor y la corneta de guerra dando dos pasos adelante, uno atrás, y otros saltos en zigzag, que para ello se requiere de mucha habilidad, destreza, y gracia sin parar.

Para las órdenes marciales, en vista que no hablaban el mismo idioma, se cocía en el hombro izquierdo de los soldados un pedazo de pellejo con lana blanca (yuraj), y otro, en el hombro derecho, con lana negra (yana), esto facilitaba la uniformidad para girar o voltear a todo la tropa. Entonces, cuando Cáceres decía “yana jaracha ticrari”, significaba que debían girar a la derecha, y cuando decía “yuraq jaracha ticrari”, significaba que tenían que girar a la izquierda, porque a ese lado estaba el pellejo blanco.

Encabeza el desfile el “Brujo de Los Andes” y su estado mayor, correctamente uniformados, montados sobre los mejores alazanes del valle de Yanamarca, seguido por el batallón desfilan las “rabonas” con sus “quipes” de alimentos, utensilios y trastos de cocina, destacando las pailas y los gigantescos cucharones de madera que blanden las sufridas mujeres compañeras de los guerrilleros.

Ocupando el centro de la formación nunca falta el “chileno” capturado por la tropa, quien es conducido con una soga o cadena que terminan enlazados en los pies y manos del enemigo derrotado.

Seguidamente van marcando el paso los batallones de Infantería Nº 3 Sector Norte y de Artillería Sector Sur, todos ataviados con vestimenta militar. Últimamente, también desfilan soldados del Ejército Peruano, además que se matizan con diversas escenificaciones del acontecer histórico nacional e internacional.

Dentro de su religiosidad y su fe, los pobladores de Acolla reviven en esta estampa folklórica su alegría triunfal en el desalojo de los chilenos del centro del Perú. Una semana Santa y Semana Patria único en el Perú.

Leer más...